| Comunicación Nº: 103 | English version  |
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José Luis Candia Bouso, Juan José Cabrera Galván, B. Candia Bouso, Pedro Saavedra.
[Título] [Material y Métodos] [Resultados] [Iconografía] [Discusión] [Bibliografía]
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El corsé de Milwaukee es una ortesis que ha revolucionado el tratamiento ortopédico de la escoliosis desde que inició su utilidad como instrumento terapéutico en el año 1946 (1). A pesar del desarrollo de nuevas técnicas quirúrgicas, desarrollo de otros corsés, sigue siendo el tratamiento de elección en las curvas escolióticas dorsales altas (2,3).
Hoy en día, el aspecto físico ha adquirido gran importancia en nuestra sociedad, justificando la preocupación estética que refieren los pacientes con escoliosis. Esto tiene gran relevancia porque la escoliosis tiene una incidencia del 4x1000 en la población general (4), y hasta un 20% de ellos presentando algún tipo de alteración psicológica (2,5).
Tras el uso de este corsé, en un principio, se detectaron alteraciones en la posición dentaria, que fueron consideradas como un pequeño precio a pagar por la mejoría obtenida sobre la columna vertebral (6). Pronto fueron descritos a nivel dentofacial por múltiples autores (7,8,9,10,11), que intentaron paliar sus efectos mediante los posicionadores dentales, que resultaron ineficaces. Como consecuencia, de estos estudios, en el año 1969, se modificó el apoyo mentoniano metálico por un apoyo hioideo de plástico. A pesar de estas modificaciones hay opiniones contradictorios sobre los efectos adversos del corsé de Milwaukee modificado a nivel dentoesquelético (12,13,14,15).
En el presente trabajo, mediante estudios cefalométricos realizados al finalizar el tratamiento de la escoliosis con el corsé de Mk, nos planteamos como objetivo valorar la estructura esquelética facial, así como el perfil de los tejidos blandos de la cara, y su correlación con las demás estructuras faciales.
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