Comunicación
Nº 033
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Agustin Chong Lopez(1), Gershom C Ejeckham(2), Abdulrazzaq Haider(2), Sheikha Al-Thani(2)
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La pieza quirúrgica recibida consistió en piel y tejido celular subcutáneo que en conjunto medía 9,5 x 7,5 x 3 cm con hilos de sutura marcando los márgenes superior y lateral de la pieza. Los cortes revelaron una masa tumoral lobulada, mal definida en sus bordes, con aspecto de carne de pescado, firme, que ocupaba el tejido celular subcutáneo (Figura 1).
El examen microscópico mostró la piel y dermis sin alteraciones (Figura 2). El tejido celular subcutáneo mostró extensas áreas ocupadas por células histiocíticas con núcleo grande y citoplasma claro de bordes mal definidos. Estas áreas eran lobuladas y en algunas de ellas alternaban los histiocitos con adipocitos normales. Estaban separadas unas de otras por bandas de tejido fibroso (Figura 3). Se observó también una importante infiltración por numerosos linfocitos y células plasmáticas intersticialmente que en la periferia de los lóbulos conformaban folículos linfoides secundarios (Figura 4) (Figura 5).
Una característica de este proceso lo constituyo la presencia de linfocitos y plasmocitos aparentemente indemnes dentro del citoplasma de las células histiocitarias (emperipolesis (Figura 6) (Figura 7). Casi todos los bordes de la resección quirúrgica estaban afectados por el proceso infiltrativo. Estos hallazgos microscópicos coincidían con los de la biopsia previa. El estudio inmunohistoquímico realizado mostró que las células de aspecto histiocítico resultaron positivas para la Proteína S100(Figura 8), tanto en forma difusa en el citoplasma como en el núcleo (Figura 9) (Figura 10). La población plasmocitaria resulto positiva para cadenas ligeras Kappa en aproximadamente el 60% de las células (Figura 11) siendo el resto positivo para cadenas ligeras Lambda.
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