Congreso Virtual sobre Anatomía Patológica

Quistes hidáticos del cerebro: Presentación de un caso

M. García Jardón*, A. Dhaffala*, N. Paton*, M. E. Rodríguez Neyra**, Lizo E. Mazwai*, E. Mukahiwa***
* WSU/NMAH REPUBLICA SUDAFRICANA
** Universidad Walter Sisulu (WSU) REPUBLICA SUDAFRICANA
*** NMAH REPUBLICA SUDAFRICANA

Resumen

Se presentan los hallazgos imagenológicos y biópsicos en una paciente con diagnóstico de hipertensión endocraneana, a la cual se le realizó una craneostomía con excéresis de lesiones quísticas parasitarias (quistes hidáticos) el Julio del año pasado. Se le resecaron más de 10 quistes de tamaño variable y se enviaron al servicio de anatomía patológica para su confirmación diagnóstica. La paciente fue dada de alta mejorada, después de cumplir el tratamiento anti-parasitario. Actualmente se encuentra bien, con una hemiparesia residual en un brazo.

 

  WSU logo - <div style=fiogf49gjkf0d">
WSU logo -

fiogf49gjkf0d


  Dra. Mirta Garcia Jardón - <div style=fiogf49gjkf0d">
Dra. Mirta Garcia Jardón -

fiogf49gjkf0d




Introduccion    

fiogf49gjkf0d
La equinococosis se define como la infección humana y animal por la larva del platelminto del género Equinococus. Se conocen cuatro especies capaces de infectar al hombre. El Equinococus granuloso forma un quiste solitario en los tejidos y órganos profundos. Se pueden formar menos comúnmente múltiples quistes. El Equinococo multilocularis causa hidatidosis alveolar. E. vogeli causa enfermedad poliquística hidatídica, y la primeria infección humana por la larva del E. oligartus se reportó en 1989. Como sinónimos se utilizan enfermedad hidatídica, quiste hidatídico, e hidatidosis alveolar (1). El Equinococus granuloso tiene una distribución cosmopolita, y se encuentra distribuido ampliamente en todo el mundo. Se ha reportado en Europa, Asia, Africa y Australia y se considera continuará diseminándose a través de la tundra y de la taigá en el noroeste de Europa. Se ha descrito igualmente en Norteamérica, principalmente al sur de Canadá y al norte de los Estados Unidos. En determinados lugares alcanza una incidencia relativamente alta, mientras que en otros la misma es prácticamente inexistente. En Australia por ejemplo se considera endémico en la especia canina, amenazando ahora con extenderse al género humano. Las ovejas y los perros se consideran los huéspedes intermediarios y definitivos más importantes. La hidatidosis alveolar predomina en países como Japón y China, aunque se identificó en Alaska que el 80% de 1579 zorras árticas estaban infectadas. El E. vogeli existe en los trópicos de América del Sur y se extiende desde Panamá, hasta Colombia y Bolivia (1). Una excelente descripción del parásito, su ciclo de vida, aspectos clínico-patológicos, patología, inmunología, diagnóstico y tratamiento aparece en el texto de Connor, Chandler y cols. (1). Este trabajo presenta los hallazgos clínicos, imagenológicos y morfológicos en una niña procedente de un area rural de Transkei en la provincia de Eastern Cape en Sudáfrica.

 

  ciclo - <div style=fiogf49gjkf0dCiclo de vida del Equinococo granuloso">
ciclo -

fiogf49gjkf0d
Ciclo de vida del Equinococo granuloso




Presentación del Caso:    

fiogf49gjkf0d

Paciente femenina de 8 años de edad, remitida el 22 de Julio del 2004 a la división neuroquirúrgica del Hospital Académico “Nelson Mandela”, con historia de cefalea progresiva que había empeorado en las 6 u 8 semanas previas a su remisión. El dolor de cabeza se asociaba en ocasiones con vómitos matutinos, sin embargo no estaba precedido por nauseas u otro síntoma. No existía historia de convulsiones previas, aunque la madre refirió notarle en ocasiones una marcha algo torpe, letargia y mareos. No existía historia anterior de trauma. La historia psicosocial reveló que la paciente era la primera de 4 hermanos, y vivía con sus padres en una zona rural de Transkei. La familia se mantenía básicamente de vegetales cultivados por ellos mismos y de algunos animales domésticos como cerdos y carneros. También tenían perros como mascotas y para el cuidado de la casa y la granja. Dos semanas antes del ingreso, la niña desarrolló una hemiparesia izquierda y visión borrosa del ojo derecho.

Examen físico:  Paciente con buen estado general, afebril (temperatura de 36.8oC), pulso 82/min, TA 100/60mm Hg y peso de 25Kg.

SNC: la paciente estaba plenamente consciente, pero se encontró una ligera proptosis del ojo derecho, con pérdida de la visión del mismo. Se detectó una atrofia temprana del nervio óptico en el fondo de ojo del mismo lado, así como una parálisis facial izquierda y una hemiplejia espástica izquierda. El resto del examen físico fue negativo.

Se emitió un diagnóstico clínico preliminar de hipertensión endocraneana en el curso de una lesión intracraneal para estudio.

Resultados de Laboratorio:

Hemograma y química sanguínea normales (negativas).

Exámenes radiológicos:

Rayo-X de tórax en tele normal.

Tomografía axial cerebral  (Figuras 1-5)  (23 Julio 2004): presencia de múltiples quistes cerebelosos con posible herniación y sospecha de localización de algunos de ellos intraventricular.

Manejo: Se inició tratamiento médico con prazicuantel, esteroides y anticonvulsivantes durante 7-10 días. En el mes de Agosto la paciente fue sometida a tratamiento quirúrgico. Se realizó una craneostomía fronto temporal derecha, por la cual afloraron numerosos quistes que se enviaron para su análisis al Departamento de Anatomía Patológica (biopsia EMA3020) (figura 11). Los quistes ocupaban mayormente la región frontal, la cual estaba muy adelgazada, con una compresión posterior del sistema ventricular. La paciente fue remitida a la unidad de cuidados intensivos donde se mantuvo en observación y estable durante 5 días. El periodo post-operatorio fue satisfactorio, y fue dada de alta el 6 de septiembre con tratamiento medicamentoso. El resultado de la biopsia aparece mostrado en la figura 6.

Se recibieron más de 20 quistes de tamaño variable entre 2 y 8cm de diámetro (figura 6). Los quistes presentaban una pared blanquecina, gelatinosa y blanda y contenían un líquido seroso transparente. Muchos de ellos mostraron un material arenoso (gredoso) en la parte interna de la pared. Histológicamente se encontró la estructura mucinosa laminada y acelular, típica de los quistes hidatídicos en la pared de los mismos (figura7, 9). Algunos de ellos estaban rodeados de una cápsula fibrosa (figura 8) En muchos de ellos se encontraron numerosos escolex del parásito así como la presencia de quistes hijos (figura 10). El 23 de septiembre se realizó una tomografía evolutiva mostrando un grado de hidrocefalia residual moderada y persistencia de algunos quistes en el lóbulo frontal derecho (figuras 12-13).

 

 

  Figura 1 - <div style=fiogf49gjkf0dResultado de la tomografía inicial, donde se observan numerosos quistes en la sustancia blanca de los hemisferios cerebrales.">
Figura 1 -

fiogf49gjkf0d
Resultado de la tomografía inicial, donde se observan numerosos quistes en la sustancia blanca de los hemisferios cerebrales.


  Figura 2 - <div style=fiogf49gjkf0dVista similar a la anterior, en diferente plano.">
Figura 2 -

fiogf49gjkf0d
Vista similar a la anterior, en diferente plano.


  Figura 3 - <div style=fiogf49gjkf0dOtro corte tomografico donde se observan igualmente los múltiples quistes con un area hiperdensa irregular, central.">
Figura 3 -

fiogf49gjkf0d
Otro corte tomografico donde se observan igualmente los múltiples quistes con un area hiperdensa irregular, central.


  Figura 4 - <div style=fiogf49gjkf0dOtro corte a diferente nivel con los mismos resultados.">
Figura 4 -

fiogf49gjkf0d
Otro corte a diferente nivel con los mismos resultados.


  Figura 5 - <div style=fiogf49gjkf0dImagen similar que muestra la presencia de numerosas lesiones quísticas.">
Figura 5 -

fiogf49gjkf0d
Imagen similar que muestra la presencia de numerosas lesiones quísticas.


  Figura 6 - <div style=fiogf49gjkf0dAspecto macroscópico de la pieza quirúrgica recibida. Obsérvense los numerosos quistes de pared gelatinosa blanquecina, muchos de ellos rotos.">
Figura 6 -

fiogf49gjkf0d
Aspecto macroscópico de la pieza quirúrgica recibida. Obsérvense los numerosos quistes de pared gelatinosa blanquecina, muchos de ellos rotos.


  Figura 7 - <div style=fiogf49gjkf0dApariencia a menor aumento de la pared del quiste hidático.">
Figura 7 -

fiogf49gjkf0d
Apariencia a menor aumento de la pared del quiste hidático.


  Figura 8 - <div style=fiogf49gjkf0dImagen del quiste donde se observa la cubierta fibrosa como parte de la reacción de defensa del hospedero.">
Figura 8 -

fiogf49gjkf0d
Imagen del quiste donde se observa la cubierta fibrosa como parte de la reacción de defensa del hospedero.


  Figura 9 - <div style=fiogf49gjkf0dAspecto de la porción mucinosa del quiste a mayor aumento que muestra mejor su aspecto laminado.">
Figura 9 -

fiogf49gjkf0d
Aspecto de la porción mucinosa del quiste a mayor aumento que muestra mejor su aspecto laminado.


  Figura 10 - <div style=fiogf49gjkf0dPresencia del parásito a mayor aumento en uno de los quistes "hijos"">
Figura 10 -

fiogf49gjkf0d
Presencia del parásito a mayor aumento en uno de los quistes "hijos"


  Figura 11 - <div style=fiogf49gjkf0dResultado final oficial de la biopsia.">
Figura 11 -

fiogf49gjkf0d
Resultado final oficial de la biopsia.


  Figura 12 - <div style=fiogf49gjkf0dVista 1 de la tomografía evolutiva.">
Figura 12 -

fiogf49gjkf0d
Vista 1 de la tomografía evolutiva.


  Figura 13 - <div style=fiogf49gjkf0dTomografía evolutiva un mes después de la excéresis quirúrgica. Vista 2.">
Figura 13 -

fiogf49gjkf0d
Tomografía evolutiva un mes después de la excéresis quirúrgica. Vista 2.




COMENTARIOS    

fiogf49gjkf0d
La equinococosis es una infección parasitaria común en nuestra región, donde su incidencia es cada vez mayor, con diagnóstico histológico confirmado en nuestro laboratorio en localizaciones tan diversas como hígado, pulmón, intracraneal, y partes blandas, incluyendo mama. Una semana después de presentado y aceptado el resumen de este trabajo, recibimos dos casos más, uno de ellos muy similar al presente, también de localización intracraneal y el otro un quiste solitario pleuro-pulmonar. La forma intracraneal requiere diagnóstico diferencial con todas las lesiones que ocupan espacio como abcesos, neoplasias, pero sobre todo, en nuestra región, con infecciones localizadas (como un tuberculoma, que fue mencionado por nosotros en uno de nuestros trabajos en el V Congreso Virtual) (2) y sobre todo la neurocisticercosis que tiene una connotación endémica en el area (3).

 

  busqueda - <div style=fiogf49gjkf0dBúsqueda bibliográfica. Existen numerosos reportes de casos similares.">
busqueda -

fiogf49gjkf0d
Búsqueda bibliográfica. Existen numerosos reportes de casos similares.


  busqueda2 - <div style=fiogf49gjkf0dBúsqueda bibliográfica 2">
busqueda2 -

fiogf49gjkf0d
Búsqueda bibliográfica 2


  Ejemplo 1 - <div style=fiogf49gjkf0dEjemplo de caso reportado (1)">
Ejemplo 1 -

fiogf49gjkf0d
Ejemplo de caso reportado (1)


  Ejemplo 2 - <div style=fiogf49gjkf0dEjemplo de casos reportados (2)">
Ejemplo 2 -

fiogf49gjkf0d
Ejemplo de casos reportados (2)




Discusión    

Conclusiones    

fiogf49gjkf0d
1) Los quistes hidatídicos son relativamente frecuentes en nuestra región. La mayoría de los mismos se encuentran en hígado y pulmones, aunque en casos aislados se pueden encontrar intracraneales, como el presentado en este trabajo.
 
2) Su elevada frecuencia en los últimos tres meses constituye una motivación para dedicarnos a una búsqueda retrospectiva de los casos diagnosticados en los últimos años con vistas a su presentación en eventos futuros.

 

  NMAH - <div style=fiogf49gjkf0dHospital Académico "Nelson Mandela". Entrada a la unidad de Accidentes y Emergencia.">
NMAH -

fiogf49gjkf0d
Hospital Académico "Nelson Mandela". Entrada a la unidad de Accidentes y Emergencia.




Agradecimientos    

fiogf49gjkf0d
Nuestra gratitud al profesor A. Stepien, por su constante apoyo y contribución a nuestro desarrollo científico. Agradecemos además al colectivo del servicio de radiología del hospital académico "Nelson Mandela" por la excelente calidad de las imágenes. 
Nuestro agradecimiento además al Profesor Humberto Foyaca Sibat por su entusiasmo, apoyo y contribución no solamente a nuestra participación en este tipo de eventos sino además por su contribución en general al desarrollo científico de la UNITRA (WSU).
Por último, pero no por ser menos, a mis colegas del servicio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario "Salvador Allende", Ciudad de la Habana, Cuba, gracias a los cuales aún me encuentro prestando servicios en este país.

 

Bibliografía    

1) Fraiji E.K. Jr, Connor D. H.: Echinococcosis, chapter 16, vol.2. page 1405-1413 of "Pathology of Infectious Diseases", de Connor y Chandler, Ed. Appleton & Lange, 1997.
 
2) Garcia Jardón M y Cols:  “¿ESTA LA AUTOPSIA LLAMADA A DESAPARECER? Estudio retrospectivo de los últimos 12 años -con énfasis en los 5 últimos- en el Dpto. de Anatomía Patológica del Hospital General de Umtata, Sudáfrica”, V Congreso Virtual Hispanoamericano de Anatomía Patológica, 2002
 
3) Foyaca-Sibat H y Cols: "Cysticercosis Working Group Eastern and Souther Africa (CWGESA) Cysticercosis/Taeniosis Training Wokshop", University of Transkei, 7-11 June, 2004.

 

 

Web mantenido y actualizado por el Servicio de informática uclm. Modificado: 16/06/2015 14:10:48